Más de 1000 jugadores fueron encuestados justo antes y después del E3 de este pasado mes de junio acerca de su intensión de compra de las consolas de actual generación, para examinar que tanto habían sido afectadas sus opiniones por lo mostrado en el evento y los resultados son positivos para Nintendo.
La intención de compra del Wii U subió casi un 50% frente a los valores antes del E3, quedando al mismo nivel que el del Xbox One, si a esto se suma que la consola tiene un buen reconocimiento dentro del público que no es propio de la industria las ventas de final de año pueden ser interesantes.
Otro dato revelado en la encuesta es que el 86% de los poseedores de un Wii U piensan comprar el nuevo Zelda que fue mostrado por primera vez en el evento digital y que se espera salga antes de que termine el 2015.